Primeramente, el Señor nos ama y nos llama, “Venid a mí”. Además, El conoce nuestras situaciones, las cargas que llevamos y como nos cansamos, y sabe que lo que necesitamos más que todo es el descanso del Espíritu Santo. Cuando llevamos su yugo – el yugo de la sumisión a la voluntad de Dios – encontramos que el secreto de vivir para Dios con éxito es vivir en el poder de Su Descanso Divino – el Espíritu Santo. ¡Es un don de Dios para todos!

Le extendemos una gran bienvenida a nuestros servicios. Como siempre, lo que hace la diferencia en cada servicio es la Presencia de Dios. Venga y experimente la paz que viene al arrepentirse de los pecados, el gozo que viene al tomar el Nombre de Jesús en el bautismo en agua, y el descanso de Dios que se encuerntra al recibir el don del Espíritu Santo, hablando en otras lenguas.

Carl Brown,
Pastor de la congregación Hispana